La caída de McConnell genera preocupaciones en medio de la transición a una nueva era de liderazgo en el Senado.

El senador Mitch McConnell, el líder republicano de 82 años de Kentucky, experimentó un pequeño contratiempo esta semana después de tropezar y caer tras el almuerzo semanal de los republicanos del Senado, lo que resultó en una muñeca esguinzada y un pequeño corte en su cara. Según un portavoz, McConnell fue examinado rápidamente por un equipo médico y desde entonces ha sido autorizado a continuar con su agenda. Testigos de la reunión informaron que pudo caminar de regreso a su oficina de manera independiente después del incidente, con el senador John Thune de Dakota del Sur, quien está preparado para asumir el cargo de liderazgo de McConnell en enero, asegurando a los observadores que el senador estaba "bien". Esta reciente caída recuerda un incidente más grave en marzo de 2023, cuando McConnell sufrió una conmoción cerebral durante una cena privada. Su historial de problemas de salud, que incluye haber sobrevivido a la polio en su infancia y lidiar con una marcha irregular y episodios ocasionales de congelación en el Capitolio, ha suscitado preocupaciones continuas sobre su bienestar y su capacidad para cumplir con sus deberes como líder del Senado. A pesar de estos problemas de salud, McConnell, el líder del Senado que más tiempo ha estado en el cargo en la historia, se está preparando para dejar su puesto de liderazgo al final de este Congreso. En discusiones recientes con sus colegas, ha expresado un sentido de liberación a medida que se acerca esta transición. Su inminente salida del liderazgo parece haberle proporcionado un enfoque renovado en cuestiones de política, notablemente aquellas que pueden ponerlo en desacuerdo con el expresidente Donald Trump. A medida que el Partido Republicano se prepara para una nueva era con Trump probablemente regresando a la presidencia en enero, McConnell ha indicado su deseo de priorizar su enfoque intervencionista en política exterior, una agenda que contrasta marcadamente con la filosofía "América Primero" de Trump. Además, ha expresado su intención de salvaguardar la independencia institucional del Senado en un momento en que se espera que Trump ejerza una influencia significativa sobre ambas cámaras del Congreso. Aunque el actual mandato de McConnell se extiende hasta 2027, no ha revelado públicamente si tiene la intención de postularse para la reelección. A medida que navega por estos cambios, sus colegas y electores estarán observando de cerca cómo equilibra su visión a largo plazo para el Senado con la dinámica de un Partido Republicano liderado por Trump.