Emimlio Juan Brignardello Vela
Emilio Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
Un nuevo estudio ha levantado alarmas sobre el potencial de los gatos domésticos para actuar como vectores del virus de la gripe aviar H5N1, destacando la urgente necesidad de que los funcionarios de salud pública mejoren los esfuerzos de vigilancia en las poblaciones felinas. A medida que el H5N1 ha circulado cada vez más entre el ganado lechero durante el último año, ha habido un preocupante aumento en las muertes de felinos, particularmente entre los gatos que viven en o cerca de granjas afectadas. Aunque el H5N1 ha impactado principalmente al ganado y ha enfermado a más de 60 humanos—la mayoría de los cuales tuvieron contacto cercano con animales infectados—los científicos advierten que el virus podría evolucionar hacia una cepa más transmisible si llegara a infectar a un gato que a su vez esté portando un virus de la gripe estacional. Este escenario plantea un riesgo, aunque actualmente teórico, en el que el virus H5N1 podría adquirir mutaciones necesarias para una transmisión eficiente entre humanos. El Dr. Suresh Kuchipudi, microbiólogo veterinario de la Universidad de Pittsburgh y uno de los autores del estudio, enfatizó la necesidad de una mayor vigilancia de los gatos, señalando sus frecuentes interacciones tanto con la vida silvestre como con los humanos. Este llamado a la vigilancia surge en un momento en que las pruebas para detectar H5N1 en vacas y humanos han sido limitadas, dejando a los expertos en salud pública con una imagen incompleta del alcance del brote en el ganado lechero. La reciente iniciativa del Departamento de Agricultura de EE. UU. (USDA) para probar el suministro nacional de leche es un paso en la dirección correcta, pero la falta de supervisión para los animales de compañía es preocupante. El impulso del estudio surgió de las misteriosas muertes de diez gatos en Dakota del Sur esta primavera. Estos gatos mostraron síntomas respiratorios y neurológicos antes de sucumbir a la enfermedad. Los investigadores encontraron que el virus aislado de los gatos presentaba una estrecha semejanza con el H5N1 encontrado en una granja lechera cercana, lo que sugiere una posible transmisión a través de aves silvestres u otros medios. La presencia de plumas de aves cerca de las mascotas fallecidas indica que podrían haber contraído el virus tras cazar aves silvestres infectadas. Los expertos ahora reconocen que varias especies, incluidos los gatos, pueden albergar tanto el virus de la gripe aviar como el virus de la gripe estacional, amplificando el potencial de reasignación viral. Richard Webby, un experto en influenza, señaló que aunque los gatos no suelen vagar en grandes grupos, la estructura anatómica de sus receptores les permite albergar ambos virus, lo que representa un riesgo de albergar y transmitir mutaciones. La composición de los receptores en los cerebros, pulmones y sistemas gastrointestinales de los gatos los convierte en candidatos adecuados para tales interacciones virales. Las implicaciones de la propagación del H5N1 a los gatos son alarmantes, ya que la cepa actual muestra una alta tasa de mortalidad en felinos—alrededor del 67 por ciento. Desde finales de 2022, al menos 53 gatos domésticos en Estados Unidos han sido identificados como infectados con el virus, con muchos casos vinculados a la depredación de aves infectadas o la exposición a leche cruda contaminada. Los virólogos están cada vez más preocupados por la adaptabilidad del H5N1, que ha demostrado infectar una variedad de especies, desde aves hasta varios mamíferos. Tom Peacock del Instituto Pirbright señaló que el virus está exhibiendo comportamientos que podrían llevar a mutaciones ventajosas, planteando más preguntas sobre su trayectoria. A la luz de estos hallazgos, la salud tanto de los gatos como de los humanos podría estar en riesgo si no se toman medidas adecuadas. A medida que se acerca la temporada de gripe, se insta a los funcionarios de salud pública a considerar las implicaciones más amplias del H5N1 en los animales de compañía y asegurar un monitoreo e investigación adecuados para prevenir posibles crisis de salud pública. A medida que la situación evoluciona, se hace cada vez más evidente que los gatos, a menudo vistos como simples compañeros, pueden desempeñar un papel mucho más significativo en la narrativa emergente de las enfermedades zoonóticas.