Los padres de Conan O'Brien, Thomas y Ruth, dejan un legado de amor y logros.

En una semana conmovedora marcada por la pérdida, la familia de Conan O'Brien llora el fallecimiento de sus dos padres, Thomas Francis O'Brien y Ruth Reardon O'Brien, quienes murieron con solo tres días de diferencia en su hogar en Brookline, Massachusetts. Thomas O'Brien, de 95 años, un estimado epidemiólogo, falleció el lunes, mientras que Ruth O'Brien, de 92 años, una abogada pionera, lo siguió el jueves. Juntos, la pareja disfrutó de un matrimonio notable que duró 66 años, criando a seis hijos, incluido el famoso comediante de la medianoche, Conan. Los O'Brien forjaron carreras impresionantes mientras criaban a una gran familia, demostrando una combinación de excelencia profesional y compromiso con la vida familiar. Thomas O'Brien hizo contribuciones significativas al campo de la medicina, destacándose como el primer director de la división de enfermedades infecciosas en lo que ahora es el Hospital Brigham and Women’s en Boston. Fue una figura influyente en la lucha contra la resistencia a los antibióticos, cofundando el Centro de Colaboración para la Vigilancia de la Resistencia Antimicrobiana para la Organización Mundial de la Salud. Su experiencia en enfermedades infecciosas le valió el respeto en su campo, y continuó trabajando en iniciativas de salud global hasta su jubilación en 2019. Por su parte, Ruth O'Brien rompió barreras para las mujeres en la profesión legal. Como una de las apenas cuatro mujeres en su clase de la Facultad de Derecho de Yale, hizo historia en 1978 al convertirse en la segunda socia femenina en el prestigioso bufete de abogados Ropes & Gray de Boston. Ruth tomó un descanso de su carrera para criar a sus primeros cinco hijos, pero regresó a la práctica a principios de la década de 1970, gestionando con éxito su vida familiar junto a una exigente carrera legal. Su hijo Conan ha contado a menudo cómo su infancia estuvo llena de amor y caos, describiendo un hogar repleto de seis niños, mascotas y la animada presencia de su abuela. A pesar de la narrativa cómica que comparte, reconoce el arduo trabajo y la dedicación que sus padres pusieron en mantener su vida familiar mientras sobresalían en sus respectivas carreras. “No sé cómo lo lograron, pero lo hicieron bastante bien. Todos estamos aquí, todos estamos vivos. No sé cómo lo hicieron”, comentó Conan, reflexionando sobre los desafíos de equilibrar la familia y el trabajo. Conan, quien ha acreditado a su padre por despertar su interés en la comedia, lo recuerda con cariño como "el tipo más divertido en la sala". En entrevistas, ha compartido que su padre tenía una profunda curiosidad acerca de la vida y la humanidad, lo que probablemente influyó en el estilo y la perspectiva cómica de Conan. Por el contrario, notó con humor que sus padres a menudo no eran conscientes de la verdadera naturaleza de su carrera, creyendo que estaba persiguiendo caminos más tradicionales en el derecho o en bienes raíces. El impacto de Thomas y Ruth O'Brien va más allá de sus logros profesionales. Fomentaron un ambiente de crianza lleno de amor y apoyo para sus hijos, lo que ha resonado en la persona pública de Conan. Su legado vive no solo en sus hijos y nietos, sino también en las vidas que tocaron a lo largo de sus distinguidas carreras. Mientras la familia se prepara para despedirse de estas dos figuras influyentes, lo hacen con el conocimiento de que Thomas y Ruth O'Brien no solo fueron profesionales exitosos, sino también padres dedicados cuyas vidas estaban entrelazadas con un amor por el otro y por su familia. Su historia es un testimonio del poder del compromiso, el trabajo arduo y el humor, incluso en tiempos difíciles.