Estudios revolucionarios sugieren que se necesita menos cirugía para pacientes con cáncer de mama en etapa temprana.

En un desarrollo significativo para el tratamiento del cáncer de mama en etapas tempranas, estudios recientes presentados en el Simposio de Cáncer de Mama de San Antonio han indicado que ciertas intervenciones quirúrgicas pueden no ser necesarias para algunos pacientes. Este hallazgo podría cambiar el panorama del tratamiento del cáncer de mama, particularmente para aquellos con carcinoma ductal in situ (CDIS) y tumores en etapas tempranas. El CDIS, una condición que afecta a aproximadamente 50,000 mujeres en EE. UU. cada año, implica el crecimiento anormal de células en los conductos mamarios, mientras que el tejido mamario circundante permanece intacto. Tradicionalmente, muchas mujeres han optado por la cirugía para eliminar el tejido afectado; sin embargo, estudios sugieren que un enfoque más conservador—la vigilancia activa—puede ser una alternativa viable y segura para un número significativo de pacientes. Uno de los estudios, publicado en el New England Journal of Medicine, siguió a más de 950 mujeres diagnosticadas con CDIS de bajo riesgo. A estas mujeres se les asignó aleatoriamente someterse a cirugía o participar en un programa de monitoreo que incluía mamografías regulares y la opción de cirugía si su condición cambiaba. Después de dos años, las tasas de cáncer invasivo se mantuvieron bajas en ambos grupos, con alrededor del 6% en el grupo quirúrgico y el 4% entre quienes fueron monitoreados. Estos datos sugieren que muchas mujeres podrían evitar la cirugía inmediata sin aumentar su riesgo de progresión del cáncer. Tina Clark, una participante del estudio, compartió su experiencia de poder evitar la cirugía mientras manejaba su vida personal, incluyendo el cuidado de un sobrino adolescente y lidiando con la pérdida de su esposo. Ella enfatizó la importancia de entender las opciones disponibles al enfrentar un diagnóstico de CDIS de bajo riesgo, destacando el valor del enfoque de monitoreo. Además del CDIS, otro estudio exploró la necesidad de biopsias de ganglios linfáticos centinela, un procedimiento común en el que se extraen ganglios linfáticos para evaluar la propagación del cáncer. Esta práctica, aunque informativa, puede llevar a complicaciones como dolor crónico e hinchazón. El estudio alemán reveló que en casos de cáncer de mama temprano donde las pacientes se sometían a cirugía conservadora de mama, la extracción de ganglios linfáticos no impactó significativamente las tasas de supervivencia. Después de cinco años, ambos grupos—los que se sometieron a la extracción de ganglios linfáticos y los que no—demostraron tasas de supervivencia similares, sugiriendo que muchas mujeres podrían potencialmente evitar este procedimiento invasivo. Los expertos en el campo son optimistas pero cautelosos con respecto a estos hallazgos. La Dra. Virginia Kaklamani del Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad de Texas en San Antonio reconoció el potencial de tratamiento excesivo en casos de CDIS y apoyó las implicaciones del estudio para la atención al paciente. Sin embargo, la Dra. Monica Morrow del Centro Oncológico Memorial Sloan Kettering instó a realizar seguimientos más prolongados antes de sacar conclusiones definitivas, enfatizando que la investigación continua es esencial para garantizar la seguridad del paciente. Ambos estudios subrayan un cambio crucial en la percepción del tratamiento para el cáncer de mama en etapas tempranas, abogando por enfoques personalizados que priorizan la calidad de vida del paciente mientras se gestionan los riesgos del cáncer. A medida que la investigación avanza, estos hallazgos podrían empoderar a las mujeres diagnosticadas con cáncer de mama en etapas tempranas, brindándoles más opciones y reduciendo potencialmente las cargas físicas y emocionales del tratamiento.