Hospital Civil de Guadalajara: Referente en atención y prevención del VIH

El Hospital Civil de Guadalajara Fray Antonio Alcalde se ha posicionado como un referente en la atención de pacientes con VIH, brindando servicios a más de 4,000 personas. Esta cifra refleja no solo la magnitud del problema, sino también el compromiso del sistema de salud en la lucha contra esta enfermedad que, a pesar de los avances, sigue siendo un desafío en términos de salud pública y estigmatización. El Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) es un agente patógeno que ataca directamente las células del sistema inmunitario, dejando a las personas infectadas vulnerables a diversas infecciones y enfermedades. En etapas más avanzadas, la infección puede evolucionar hacia el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA), una condición que, de no ser tratada adecuadamente, puede acortar la expectativa de vida de los pacientes. La doctora Luz Alicia González Hernández, jefa de la Unidad de VIH del hospital, ha señalado la importancia de desmitificar creencias erróneas sobre el VIH. Muchos todavía piensan que el virus se puede transmitir a través de interacciones cotidianas, pero la realidad es que se transmite principalmente a través del intercambio de fluidos corporales. Esta falta de información ha contribuido a la estigmatización de quienes viven con el virus, lo que puede llevar a la discriminación y al retraso en la búsqueda de atención médica. En el Hospital Civil, el enfoque en el tratamiento es integral y personalizado. Los pacientes diagnosticados con VIH reciben un tratamiento antirretroviral que les permite llevar una vida más saludable y activa. Este régimen incluye una pastilla diaria que ha demostrado ser eficaz en la mejora de la calidad de vida de los pacientes al reducir la carga viral a niveles indetectables. Además, el hospital ofrece la Profilaxis Pre Exposición (PrEP), una estrategia que ha ganado terreno en la prevención del VIH. Esta opción está disponible de manera gratuita y se recomienda especialmente para personas en riesgo, como aquellas que han tenido relaciones sexuales sin protección. La PrEP consiste en la ingesta diaria de un medicamento que reduce significativamente las probabilidades de adquirir el virus. La importancia de las pruebas de detección del VIH es otro aspecto que resalta la doctora González. Aconseja a las personas que han estado expuestas a factores de riesgo que se realicen la prueba, así como a todas las mujeres embarazadas, ya que la detección temprana es crucial para evitar la transmisión vertical del virus al feto. En México, las estadísticas son alarmantes, con una persona diagnosticada cada 30 minutos, lo que subraya la urgencia de tomar conciencia y actuar. La atención en el Hospital Civil se extiende a poblaciones vulnerables, incluyendo mujeres embarazadas y personas transgénero. Según el investigador Carlo Valentino García y Nuño, hay un número significativo de jóvenes menores de 24 años que también recibe atención, lo que indica que la educación y la prevención deben centrarse en este grupo demográfico. La sensibilización sobre el VIH es esencial para evitar que las nuevas generaciones se conviertan en parte de las estadísticas. Los avances en la medicina han permitido que las personas diagnosticadas con VIH puedan vivir vidas largas y saludables. Se estima que quienes reciben atención oportuna pueden alcanzar una expectativa de vida cercana a los 76 años. Esto es un avance significativo, pero también resalta la necesidad de continuar trabajando en la prevención, educación y atención integral. La transmisión del VIH puede ocurrir en diferentes etapas del embarazo, y la detección temprana es clave para mitigar estos riesgos. La doctora González explica que la transmisión puede ocurrir durante el embarazo, el parto o la lactancia, lo que enfatiza la importancia de que las mujeres se realicen pruebas de detección y sigan los tratamientos adecuados si se diagnostican positivas. En conclusión, el Hospital Civil de Guadalajara ejemplifica un modelo de atención que no solo se enfoca en el tratamiento, sino también en la prevención y el apoyo a las poblaciones vulnerables. A medida que avanzamos en el conocimiento y el manejo del VIH, es fundamental que la sociedad en su conjunto colabore para eliminar el estigma y mejorar la calidad de vida de quienes viven con este virus. La educación, la detección temprana y el acceso a tratamientos son pasos cruciales en la lucha contra el VIH y SIDA, y cada uno de nosotros juega un papel importante en este esfuerzo colectivo.