Escándalo de los Hogares de Ancianos de Nueva Jersey: Fraude, Abuso y un Robo de 253 Millones de Dólares Descubierto.

En Nueva Jersey, un informe impactante de la oficina del contralor estatal ha revelado un patrón perturbador de fraude y abuso en el sistema de hogares de ancianos del estado, lo que ha llevado a la prohibición de tres hombres para participar como proveedores de Medicaid. Mordechay Weisz, Steven Krausman y Michael Konig, quienes gestionaban una red de hogares de ancianos, son acusados de desviar millones de Medicaid mientras proporcionaban atención de calidad inferior a sus residentes. La investigación reveló una dura realidad en South Jersey Extended Care en Bridgeton y Sterling Manor en Maple Shade, ambos lugares que han recibido consistentemente las calificaciones más bajas posibles de las autoridades federales. El informe detalla condiciones preocupantes que incluyen entornos de vida insalubres, negligencia médica y abuso directo de los pacientes. Los inspectores documentaron una escena que recordaría a cualquier comunidad el abandono: dormitorios infestados de moscas, olores desagradables, instalaciones en mal estado y casos en los que los asistentes encerraban a residentes vulnerables, incluidos aquellos con demencia, en sus habitaciones con bolsas de basura de plástico. Para agravar aún más las preocupaciones, se informaron casos de abuso físico, incluido un caso perturbador en el que se dijo que un miembro del personal "manejó bruscamente" a un residente en silla de ruedas, lo que resultó en la hospitalización del residente debido a una lesión abdominal. El informe también destacó la falta de administración oportuna de medicamentos a los residentes, con algunos que no recibieron medicamentos esenciales durante horas, y una falta de supervisión profesional, ya que las instalaciones operaban sin un director de enfermería o trabajador social con licencia. Las irregularidades financieras son igualmente atroces. Durante un período de cinco años, desde abril de 2018 hasta marzo de 2023, se informó que el trío desvió 253 millones de dólares de sus instalaciones, con un asombroso 76% de esa cantidad proveniente directamente de Medicaid. Participaron en una serie de transacciones de auto-beneficio donde se otorgaron contratos a empresas que controlaban a precios inflados, proporcionando en última instancia pocos o ningún bien o servicio a cambio. Como resultado de la investigación, se notificó a los tres hombres que su financiación de Medicaid cesaría en 60 días, dejando a sus instalaciones y a los residentes que dependían de ellas en una situación precaria. Si bien no está claro cuántos residentes se verán afectados por esta suspensión, los funcionarios estatales están trabajando activamente para asegurar arreglos alternativos de atención. El informe también revela el dudoso historial del Sr. Konig, quien ha enfrentado sanciones en Connecticut y Massachusetts debido a graves violaciones en las operaciones de hogares de ancianos. A pesar de un historial manchado por problemas regulatorios, se alega que continuó sus operaciones de hogares de ancianos en Nueva Jersey a través de miembros de su familia, evadiendo el escrutinio y perpetuando un ciclo de negligencia. Los hallazgos han planteado preguntas sobre la supervisión regulatoria en la industria de hogares de ancianos de Nueva Jersey, con el contralor estatal, Kevin Walsh, enfatizando la necesidad de responsabilidad. "Estas personas se beneficiaron del desamparo de aquellos que querían una mejor atención pero no tenían forma de obtenerla", afirmó Walsh, subrayando la gravedad de la situación. A medida que continúan las investigaciones, se pueden imponer sanciones y penalizaciones adicionales, y se insta al estado a hacer cumplir regulaciones más estrictas para prevenir que tales abusos ocurran en el futuro. Las revelaciones han provocado indignación en la comunidad, exigiendo responsabilidad para aquellos que han fallado en proteger a los ciudadanos más vulnerables del estado. Con muchos residentes dejados en la incertidumbre, el camino a seguir para los afectados sigue siendo una preocupación crítica mientras Nueva Jersey lidia con las implicaciones de este alarmante informe.