Emimlio Juan Brignardello Vela
Emilio Juan Brignardello Vela, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
Un estudio innovador de Columbia Engineering y el Instituto Irving para la Dinámica del Cáncer ha revelado una prometedora vía para mejorar el tratamiento del cáncer en pacientes que sufren de leucemia mieloide aguda (LMA) en recaída. La investigación, realizada en colaboración con el Instituto Oncológico Dana-Farber, identifica una población distintiva de células T inmunitarias que podría ser fundamental para mejorar la eficacia de las inmunoterapias existentes para esta desafiante condición. La leucemia mieloide aguda es una forma de cáncer particularmente agresiva, que afecta aproximadamente a cuatro de cada 100,000 individuos en los Estados Unidos anualmente, según el Instituto Nacional del Cáncer. Principalmente ataca la médula ósea antes de propagarse al torrente sanguíneo, y el protocolo de tratamiento estándar típicamente implica quimioterapia dirigida seguida de un trasplante de células madre. Sin embargo, a pesar de este régimen de tratamiento intensivo, alrededor del 40% de los pacientes experimentan una recaída, con una sombría tasa de supervivencia media de solo seis meses después de la recaída. En esta etapa, la inmunoterapia a menudo representa la última línea de defensa en la búsqueda de la remisión. Dirigido por Elham Azizi, profesora asociada en Columbia Engineering, el equipo de investigación buscó entender los factores que determinan las diversas respuestas a la inmunoterapia entre los pacientes con LMA. El tratamiento de inmunoterapia predominante para la LMA en recaída, conocido como infusión de linfocitos de donante (DLI), tiene una desalentadora tasa de supervivencia a cinco años de apenas el 24%, según estudios de Pfizer. Esto requirió una investigación más profunda sobre los mecanismos biológicos en juego. Los hallazgos del equipo sugieren que un subconjunto único de células T en pacientes que responden positivamente al DLI juega un papel crucial en la lucha contra la leucemia al mejorar la respuesta inmune. Además, descubrieron que los pacientes con un entorno inmune más robusto y diverso dentro de su médula ósea están mejor posicionados para apoyar a estas células T en su lucha contra el cáncer. Esta percepción subraya la importancia del paisaje inmune del paciente, más que solo las características de las células inmunitarias del donante, en la influencia del éxito del tratamiento. Utilizando su método computacional patentado, conocido como DIISCO, los investigadores analizaron las complejas interacciones entre la población de células T identificada y otros componentes inmunitarios a lo largo del tiempo. Este enfoque innovador de aprendizaje automático aclara cómo estas interacciones pueden llevar a mejores resultados en los pacientes, ofreciendo así nuevas vías potenciales para la intervención. Las implicaciones de este estudio son significativas. Sugieren que mejorar el entorno inmune antes de iniciar el tratamiento con DLI podría mejorar las respuestas de los pacientes. Este enfoque también podría allanar el camino para explorar combinaciones novedosas de inmunoterapias, adaptando así las estrategias de tratamiento a las necesidades individuales de los pacientes y aumentando la probabilidad de resultados exitosos. "Esta investigación ejemplifica el poder de combinar métodos computacionales y experimentales a través de una estrecha colaboración para responder preguntas biológicas complejas", comentó Azizi, quien también está afiliada al Instituto Irving para la Dinámica del Cáncer y al Instituto de Ciencia de Datos de Columbia. "Nuestros hallazgos no solo iluminan los mecanismos subyacentes a las respuestas exitosas de inmunoterapia en la leucemia, sino que también proporcionan una hoja de ruta para desarrollar tratamientos efectivos guiados por herramientas innovadoras de aprendizaje automático". Cameron Park, estudiante de doctorado en el laboratorio de Azizi y co-líder del estudio, expresó optimismo sobre el impacto potencial de sus descubrimientos. "Ver nuestros hallazgos validados a través de experimentos funcionales es increíblemente emocionante y ofrece una verdadera esperanza para mejorar la inmunoterapia contra el cáncer", dijo. De cara al futuro, el equipo de investigación planea investigar más a fondo intervenciones que podrían mejorar la efectividad del DLI, considerando estrategias para modular el microentorno tumoral. Aunque los resultados son prometedores, el camino hacia los ensayos clínicos apenas comienza, y queda mucho trabajo por hacer para traducir estos hallazgos en mejoras tangibles para los pacientes que lidian con LMA en recaída.